Jaime Villanueva, Dtor General Econocom|Caverin, Actividad  Productos & Soluciones

El comercio global se enfrenta al reto de adaptarse a los nuevos paradigmas de compra de los clientes, que han abierto vías de negocio todavía por explotar. Tecnologías como Big Data o el desarrollo de webs más avanzadas se tornan imprescindibles para desarrollar estrategias adaptativas que coincidan con las prácticas digitales, costumbres y gustos de los compradores actuales, con el fin de captar su atención con ofertas personalizadas que lleven finalmente a la venta.

En este contexto es necesario establecer alianzas con expertos que les muestren las posibilidades del comercio inteligente. Un escenario en el que Grupo Econocom, estamos trabajando desde hace años ayudando a los retailers a implantar estrategias de este tipo, tiene mucho que decir.

Nuestros expertos aseguran que saber extraer el verdadero valor de la información que se genera es una “mina” que ayuda a personalizar ofertas o detectar tendencias de compra. Un gran paso hacia este comercio inteligente. Pero, hay más. Canales digitales como las redes sociales o la web son también un área en el que hay que trabajar. Porque, cada vez más, los clientes van primero a estas vías antes de acudir a la tienda física. Además, buscan a través de ellas oportunidades o descuentos que les ayuden a decidir sus compras.

Optimizando todas estas herramientas, el comercio tiene la oportunidad de ajustarse rápidamente a los continuos movimientos de la demanda, así como dotar a los clientes de un acceso más “inteligente” a la gran oferta de productos y servicios existente.

El análisis de estos datos les permite dibujar un perfil digital de cada consumidor, así como conocer sus preferencias e intereses y, desde su análisis, construir trajes a medida en forma de servicios personalizados. Sin olvidar que explicar un patrón de comportamiento permite predecirlo y, por tanto, adelantarse a la demanda. Esa es la verdadera revolución de Big Data.

Para llegar a este propósito, debemos atraer al cliente, con ofertas tentadoras que impliquen la cesión de ciertos datos personales, gustos y preferencias. Y, a partir de ahí, construir una visión de 360​​° de cada consumidor. Del análisis de estos datos podrán extraerse conclusiones que nos permitan optimizar todo el proceso de venta. Pero lo fundamental es que seremos capaces de ofrecer un servicio superior, ajustado a cada perfil de cliente y que ofrezca mayor satisfacción.

No apostar por esta tecnología puede ser letal para muchos negocios durante los próximos años. Y es que aquellos que no sean capaces de entender las verdaderas necesidades del nuevo cliente comenzarán, poco a poco, a perder el tren de este comercio inteligente.

 

Jaime Villanueva, Dtor General Econocom|Caverin, Actividad  Productos & Soluciones